Según un informe oficial, el aumento de los precios ha llevado al 45% de los consumidores a comprar menos carne y al 39% a comprar menos productos del mar.
Sin embargo, los productos cárnicos están presentes en el 95% de las cestas de compra y los productos del mar, como pescados y mariscos, en el 92%. De hecho, se ha demostrado que la carne y el pescado representan el 34% del gasto total en alimentos de los españoles.
Los alimentos y la Inflación
De acuerdo con los datos oficiales, el precio y el tipo de productos son los principales factores que influyen en la decisión de compra de carne para el 60% de los consumidores.
En el caso del pescado, la frescura es lo más relevante para el 62% de los compradores. Además, el estudio indica que los consumidores prefieren adquirir carne y pescado en mostradores de venta asistida en lugar de optar por productos envasados, ya sean congelados o refrigerados.
La inflación puede tener un impacto significativo en el precio de los alimentos, ya que se trata de un factor que afecta al valor general de la moneda y al poder adquisitivo de los consumidores.
Cuando la inflación aumenta, el precio de los alimentos también tiende a subir, ya que los productores y distribuidores deben gastar más dinero para adquirir los insumos necesarios para producir los alimentos y transportarlos a los puntos de venta.
Además, la inflación puede afectar a diferentes sectores de la industria alimentaria de manera desigual, lo que puede dar lugar a un aumento desproporcionado en el precio de algunos alimentos específicos.
Los productos frescos y perecederos son particularmente sensibles a los cambios en la inflación, ya que su precio puede verse afectado por las variaciones en el costo de los insumos y el transporte.
En resumen, la inflación puede provocar un aumento general en los precios de los alimentos y afectar de manera desigual a diferentes sectores de la industria alimentaria. Los consumidores pueden verse afectados al tener que pagar más por los alimentos, lo que puede limitar su capacidad para adquirir productos básicos o reducir su poder adquisitivo en general.
Consejos para realizar nuestras compras a pesar de la subida de precios
Algunos de los consejos que pueden ayudar a los consumidores a realizar sus compras a pesar de la subida de precios son los siguientes:
- Comparar precios: Antes de realizar una compra, es recomendable comparar los precios de diferentes productos y establecimientos. Es posible que se encuentren alternativas más económicas que permitan ahorrar dinero.
- Planificar las compras: Es importante planificar las compras y hacer una lista de los productos necesarios. Esto ayuda a evitar compras innecesarias y a reducir el gasto total.
- Comprar productos en temporada: Los productos de temporada suelen ser más económicos que los que no lo son. Además, suelen estar más frescos y tener mejor sabor.
- Elegir marcas blancas o marcas menos conocidas: Las marcas blancas o menos conocidas suelen ser más económicas que las marcas reconocidas. En algunos casos, la calidad es similar y se puede ahorrar dinero.
- Comprar a granel: En algunos casos, comprar productos a granel puede ser más económico que comprarlos envasados.
- Aprovechar ofertas y promociones.