En materia laboral existe un término que no puede estar ajeno tanto a empleadores como a trabajadores. Se trata de la nómina que según lo que indica nuestra Real Academia de la Lengua (RAE), es la “relación nominal de los individuos que en una oficina pública o particular han de percibir haberes y justificar con su firma haberlos recibido”.
Si bien visto de esa manera poco claro nos queda, al aplicarlo en el día a día de seguro que todos entendemos qué queremos decir cuando mencionamos la nómina en nuestro empleo. Lo que todos conocemos como nómina o la preparación de una nómina constituye una función separada del mantenimiento de los registros a través del cual se muestra el salario, cargo, tiempo de trabajo, deducciones y devengados, adiciones de nómina y demás datos relacionados con el personal.
Para su preparación se llevan a cabo varios pasos, el primero se ejecuta al final de cada período de pago, y consiste en la preparación de la nómina, donde debe mostrar los nombres y remuneraciones de los trabajadores.
Como bien dijimos, se realiza a partir de pasos fundamentales que son comunes en la mayoría de las organizaciones. La información que se incluye en ese registro, a través de la preparación de de nómina, consiste en el salario autorizado para cada trabajador y el número de horas trabajadas, tomadas de las tarjetas de tiempo o de documentos similares.
Después de separar las horas ordinarias de las extraordinarias, y de aplicar las tarifas apropiadas para cada categoría laboral se tiene el total del salario devengado. La retención en la fuente, el aporte al seguro social y cualquier otra deducción autorizada por el trabajador se registran luego del valor devengado para obtener por diferencia entre el total devengado y los totales retenidos el valor neto.
En este sentido, consideramos la nómina a los recibos de cada uno de los salarios, referido a meses naturales. La preparación de cheques o de la transferencia bancaria de nómina constituye una función generalmente separada del mantenimiento de los registros que muestran el salario, cargo, tiempo de trabajo, deducciones y devengados, adiciones de nómina y demás datos relacionados con el personal, que deberán conservarse con el comprobante del abono y los boletines de cotización a la Seguridad Social.
Por esta razón es que también se denomina nóminas a las cuentas bancarias donde depositamos nuestro salario mensual. En este sentido, a continuación les ofrecemos las mejores cuentas nómina:
- SuperNómina Santander
- Super Cuenta Nómina Básica Santander
- Cuenta Nómina Bancomer
- Cuenta Nómina Ejecutiva Plus HSBC
- Cuenta Nómina Ejecutiva HSBC
- Cuenta Nómina Clásica
- Cuenta Nómina Banco Azteca
- Cuenta Nómina Inbursa
- Cuenta Nómina de Scotiabank
- Cuenta Nómina Banamex
- Cuenta Ixe Positiva Nómina
- Cuenta Ixe Maestra Nómina
- Cuenta Nómina Banco Afirme
Como bien dijimos, las nóminas se confeccionan una vez al mes a cada trabajador de la empresa, el procedimiento que se ha de seguir para su confección es el siguiente:
- Se miran las percepciones salariales y no salariales de cada trabajador para calcular sus descuentos
- Cálculo de las bases de cotización por contingencias comunes y la base de cotización por contingencias profesionales, también la base de horas extras, etc.
- Solo queda calcular la retención fiscal, pago a cuenta del impuesto sobre la renta de las personas físicas de acuerdo a un porcentaje del total devengado anual.
Algunos enlaces de interés:
Asimismo, dejamos un video que explica algunas cuestiones sobre el impuesto sobre la nómina: